Un año más, y van cuatro, se ha
presentado una nueva edición del índice IESE
Cities in Motion (ICIM). Desde sus orígenes, el ICIM ha validado
empíricamente un modelo conceptual, que evalúa las ciudades teniendo en cuenta
diez dimensiones clave: capital humano,
cohesión social, economía, gestión pública, gobernanza, medioambiente,
movilidad y transporte, planificación urbana, proyección internacional y
tecnología.
El modelo surgió como respuesta a
la intensificación del proceso de urbanización que están experimentando todas
las regiones del mundo (aunque a distintos ritmos). Se espera que dos tercios
de la población mundial residan en ciudades en el año 2050, aunque, en muchas
zonas geográficas, este hecho es ya una realidad. Si bien esta tendencia de
aglomeración en ciudades tiene una serie de aspectos positivos (como la
innovación, la creación de riqueza y la competitividad económica), también
presenta un lado oscuro, en el que los grandes retos globales ponen en riesgo
la sostenibilidad de las ciudades.