viernes, 8 de junio de 2018

La inversión pública española en construcción, menor que otros países UE


Las grandes empresas constructoras españolas continúan teniendo verdaderos problemas para mantener su antigua capacidad productiva, y lo peor es que el futuro inmediato no es esperanzador. Habrá que ve si el nuevo gobierno, supuestamente más social, mejora los ratios de inversión a medio plazo. 

Según el Informe de SEOPAN (Asociación de empresas constructoras y concesionarias de infraestructuras) “Construcción e Infraestructuras 2017/2018”, se amplía la brecha inversora con las cuatro mayores economías europeas. En 2018/2019, España invertirá un 63% menos.

La inversión pública realizada y proyectada para la década de 2010 en Reino Unido, Alemania y Francia, crecerá en términos reales respecto a la década precedente un 26%, 18% y 3% respectivamente, frente a una reducción del 35% en España.


Los inversión pública comparada (2016) de España con Alemania, Reino Unido, Francia e Italia confirma lo siguiente:
  •    Infraestructuras de salud: invertimos por habitante un 30% menos que la media (46 vs 66 €/habitante)
  •      Infraestructuras de educación: invertimos por habitante un 71% menos que la media (27 vs 93 €/habitante)
  •       Infraestructuras de protección del medio ambiente: invertimos por habitante un 62% menos que la media (20 vs 53 €/habitante)
  •       Infraestructuras de transporte (asuntos económicos): invertimos en valor absoluto un 54% menos que la media (8.700 vs 18.875 M€)



Fuente: Informe SEOPAN 2017/2018



Todo ello a pesar de que la economía española ha recuperado el nivel máximo de PIB real anterior a la crisis, alcanzado en el segundo trimestre de 2008. No obstante, no todos los componentes del PIB, ni por el lado de la demanda ni de la oferta, han recuperado aún sus niveles pre-crisis. El análisis de nivel en el que se encuentran los componentes de construcción privada y pública, en relación a su nivel máximo, nos ofrece una idea de los cambios estructurales que ha registrado nuestra economía durante estos nueve años.

En cuanto a la inversión en construcción, tanto en su componente de vivienda como de otras construcciones, la caída fue dramática: un 53% en el primer caso y un 42% en el segundo. La inversión en construcción residencial se ha recuperado a tasas relativamente dinámicas en los últimos trimestres, pero aún se encuentra muy lejos de los niveles pre-crisis. El otro componente de la inversión en construcción, muy influido por la inversión pública, ni siquiera se puede decir que haya iniciado un proceso de recuperación.


Fuente de los gráficos: INE